Mente

¿En verdad todas esas historias que nos contamos son 100% reales y objetivas? ¿Desde dónde viene eso que me estoy contando? ¿Qué no estoy viendo? ¿Realmente es complicado o yo lo estoy haciendo complicado? Mis creencias subconscientes se proyectan todo el tiempo y son las que responden a esos estímulos externos. Cuestionemos eso que me he o que me han contado que es verdad, y hagamos un viaje hacia el interior para ir transformando esas creencias y que sean esas creencias llenas de amor y respeto, las que se proyecten hacia el exterior.

La realidad existe, yo puedo elegir lo que me digo acerca de ella. El reto es ejercer esa libertad de verla tal y como es y decidir desde dónde la interpreto, desde una creencia expansiva o desde una limitante. Todo lo que percibo por medio de mis sentidos, es filtrado por mi percepción y experiencia. La invitación es que antes de emitir un juicio sobre eso que recibo, me pregunte desde dónde viene y saber que siempre tengo la libertad de transformar la forma en la que percibo esa “realidad”, seamos creativos para ver las oportunidades aún en las adversidades. Todos tenemos una realidad distinta que hemos formado de acuerdo a nuestras experiencias y a nuestro camino. Ningún camino es mejor que otro, aceptemos que dentro de la diversidad está la armonía del Universo. Enfoco mi energía en transformar esos estímulos del exterior en amor y respeto hacia mí y hacia los demás, al no tratar de imponer mi verdad, porque esta también ha sido construida desde mi percepción.

Hoy elijo contarme historias desde el amor y respeto, que nutran mi camino de transformación. Elijo enfocar mi energía en mi bienestar porque cuando estoy bien en mi interior, puedo estar bien hacia el exterior. Y aceptar que, es parte de mi naturaleza repetir patrones pasados, el factor que hará la diferencia será no juzgarme ni entrar en el autocastigo.

Cuando comienzo a cambiar las historias que me cuento, mi realidad comienza a cambiar. Mi percepción crea mi realidad.

Be & Dream